Kinnick Stadium durante un partido de los Iowa Hawkeyes |
La mayor característica del Kinnick Stadium, con capacidad para 70.585 aficionados, sorprendentemente no es la ausencia de luces de campo (la escuela contrata a una empresa para iluminar el campo siempre que sea necesario), sino el color del vestuario de equipo visitante, rosa.
La idea surgió hace algo más de 30 años gracias a el ex-entrenador de los Iowa Hawkeyes, Hayden Fry, que consideró que tendría un efecto psicológico contra sus rivales: “Es un color pasivo, y esperábamos que sirviese para poner a todos nuestros oponentes en un estado de ánimo pasivo. Además, a menudo se encuentra el color rosa en las habitaciones de las niñas y algunos lo consideran que es un color marica".
A pesar de diversas protestas por considerar esto degradante para homosexuales y para las mujeres, “recientes” reformas en el 2005 convirtieron también en rosa accesorios del vestuario tales como urinarios o toallas.
Si alguna vez tiene la oportunidad de jugar como visitante en el Kinnick Stadium, esto será lo que se encontrará:
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